lunes, 31 de agosto de 2009

Facultad de Filosofía y Piedras 2: Si se fueron las piedras ¿por qué se quedó la cerrazón?

En los comentarios de la primera parte de esta zaga hay se tocaron algunos puntos en los que es conveniente abundar.

Gracias a quienes leen, difieren y comentan, sus puntos de vista divergentes ayudan a enriquecer este espacio... Porque se toman en cuenta, no lo digo nada más por quedar bien...

Los jardines de la Biblioteca Central.

Terminó la campaña de los vendedores antes desalojados y ahora reubicados, ¿Por qué? Pues porque ya les dieron pequeñas casetas para vender de modo regulado. Las señoras de los antojitos reacondicionaron su espacio, la mitad de los espacios mercantiles funcionan ya y no veo que más allá de este semestre terminen de ubicarse.

Este es mi punto: ¿Ya no van a pelear por los macetones?, ¿Ya no están inconformes con el empedrado de la Biblioteca Central?

Ni les interesaba la seguridad de los estudiantes de la FFyL (pues de no haber macetas en el suelo, estarían ellos) ni les apura ya el asunto de las piedras, estas ya no representan un icono de la cerrazón y la clausura de conciencias...

¿Alguien los culpa? Para nada, ellos sólo defendían su modo de vida, qué bueno que hubo modo de que la situación fuera mediada.

Hace un par de semanas, no obstante, otro frente se presentó a objetar la intromisión de las piedras y las macetas en nuestras vidas: Estudiantes de arquitectura.

Por una parte, dijeron que era verdad que los macetones son un peligro en caso de evacuación (no es que no lo supiéramos, pero no es lo mismo cuando lo dicen ellos que saben de protección civil); además, dijeron que el proyecto original de la Biblioteca Central no contemplaba los jardines de piedra y se incurría con esta modificación en un tipo de violencia para con la Biblioteca Central y el Campus de Ciudad Universitaria.

Es un argumento formidable.

¿Qué más quisieramos que preservar la Universidad que es patrimonio de la humanidad?Los estudiantes de arquitectura tienen razón en que:

a) no conviene tener macetones en los pasillos (y creo que estarían de acuerdo en que vendedores ambulantes tampoco, pero si pongo palabras en su boca desmiéntanme), pues es inseguro.
b) No se debe violentar el proyecto arquitectónico original de la Biblioteca Central con piedras.

Pero de nuevo... ¿El jardín de la Biblioteca Central estaba pensado para ser cantina los viernes?, los pasillos aledaños estaban pensados para ser fumaderos de marihuana?

Se dijo que sería de lo más triste que el jardín de la Biblioteca Central fuese conocido en el futuro como "el patio de las piedras"; ¿no es igualmente desaveniente que tengamos "el jardín de las chelas" y el "andador de la mota"?

El punto -en ningún momento- no es censurar el consumo de drogas y alcohol, sino decir que cada cosa tiene su lugar: Leer, conversar, estudiar se hace en la biblioteca central; drogarse o embriagarse en otro lado fuera de la Universidad.

No es mi ánimo cuestionar la lucha de los estudiantes de arquitectura, como dije, su argumento es formidable; sí plantearía la siguiente pregunta: ¿El proyecto arquitectónico no encuentra agravio en el uso que se da a las instalaciones?, y más aún ¿el patrimonio de la humanidad debe estar dispuesto para que nos droguemos y embriaguemos?

Hay qué decir también que las piedras no resultaban desagradables para todos ; cierto, era una minoría aquella a la cual agradaban y más bien les parecía divertida la idea de que se siguieran metiendo a beber y drogarse entre las piedras, y luego se pusieran a brincar. Pero este no es un asunto de contentar a la gente, si ha prevalecido la idea de custodiar nuestra universidad porque es patrimonio de la humanidad, defendámosla de las autoridades cuando han errado, sí; defendámosla de los estudiantes cuando yerran también.

Será bello que regresen los jardines de la Biblioteca Central; ojalá con ellos venga un espíritu de responsabilidad, y no se trate del éxito de un berrinche universitario.

Explico pues el título de esta entrada: Se fueron las piedras, se quedó la cerrazón.

Ya está en curso la restauración de los jardines, y en consonancia con la maquinaria pesada se dejaron oir altavoces la semana pasada arrojar las siguientes consignas (obvio no por parte de los estudiantes de arquitectura que dieron el otro argumento; eran los inconformes de siempre):

1) La universidad -Narro- desperdicia dinero en remodelar jardines y luego en des-remodelarlos...

Bueno, como se dijo recién, es cierto que es mejor conservar nuestra universidad en condiciones óptimas; no sé de qué manera les parece que dar buen uso a las instalaciones universitarias es ponerse a gritar afuera de una biblioteca... Las bibliotecas son para estudiar, leer, escribir... Suele sugerirse y demandarse silencio en su interior... Tal vez no tengan mucha noticia de cómo se usan y por ello les parece pertinente ponerse a vociferar sus ideas al exterior de la Central... Y llevar grupos de hip hop... ¿Le preguntaron a los usuarios de la biblioteca si su música les estorbaba al estudiar? Es cierto, ojalá no se hubiera hecho el doble gasto, pero negar que se demandó la restauración del jardín y se ignoraba que tendría un costo llevarla a cabo es simplemente tonto.

2) Es injusto que los estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras no tengan ya estacionamiento.

El estacionamiento destinado para Académicos y trabajadores de la Biblioteca Central y la Facultad de Filosofía y Letras resultaba insuficiente en su formato anterior; la bahía que era de libre acceso se había vuelto ya nicho de conflicto porque nadie quería ser el que se tuviera que ir a estacionar al estadio... ¿A dónde? Al estadio Olímpico Universitario, donde de manera gratuita todos los miembros de la comunidad universitaria pueden estacionarse; el transporte gratuito Pumabús lleva a los usuarios del estacionamiento a cualquiera que sea su destino en Ciudad Universitaria... Buena parte de los Académicos de la Facultad son gente de edad avanzada, ¿a ellos hay qué mandarlos a tomar el Pumabús en vez de los jóvenes estudiantes? Hay condiciones para estacionar autos y desplazarse en Ciudad Universitaria, si no llenan el ojo de su noción de comodidad es otra cosa. Además... ¿no que no les alcanza para "Mits Op"?, ¿cómo es que tienen carro?

c) No hay libros suficientes en la Biblioteca Samuel Ramos.

Seguramente ya se terminaron los que hay... Una vida no alcanzaría para leer lo que hay ahí; Si quieren que haya 300 ejemplares de "El capital" para babearlos mientras escupen sus ideales por un altavoz pueden donarlos a la Biblioteca...

El ánimo de estar en contra de todo sugiere que nada de bueno se encuentra en el presunto antagónico... Quienes hemos recibido mucho de la UNAM le tenemos gratitud, ¿será que sus detractores no han recibido nada de ella (naturalmente no una educación) y es por ello que quieren a toda costa arrebatarle algo?

7 comentarios:

  1. Por lo menos tres de cada cinco libros que busco en la biblioteca central y en la biblioteca de la facultad, en el sistema aparecen como existentes, pero en los estantes no se encuentran. Muchos libros están en malas condiciones también. Esto es una realidad, como también lo es que fué una mala estrategia por parte de rectoria poner piedras para después quitarlas, debieron haber medido lo que ocurriria para en primer lugar no hacer lo que después tendrian que deshacer. Una medida más eficiente habría sido poner a alguien de seguridad.
    El estacionamiento también es un problema, de plano somos demasiados en la facultad y en la UNAM. No sé como estén las finanzas de la universidad, pero según algo que alguna vez me comentó una maestra, la UNAM tiene presupuesto suficiente para ampliar la facultad y/o el estacionamiento, pero no quiere alterar la estética de la universidad. Esa es otra historia por supuesto.
    Pero ojo, aunque alguien gritando por un altavoz se vea como irracional, no por ello nada de lo que diga es cierto, no seas irracional.

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  2. Bueno, todos los estudiantes de la facultad sabemos que nuestra biblioteca podría ser mejor. Todo es mejorable. Pero es injusto decir que es mala. Y tomar sus deficiencias como argumrnto contra "el autoritarismo". Si los libros están en mal estado es por culpa de los usuarios que los mutilan, rayan, y otras cosas. Y pues luego sí hay libros que faltan y uno no encuentra, sobretodo los de alta demanda. Durante toda mi vida de estudiante no encontré un ejemplar bueno de la Crítica de la Razón pura. Pero lo cierto es que casi nadie lo lee, aunque lo hubiera, bueno más allá de la introducción al menos.
    Y he encontrado muchos libros de temas muy buenos que nadie había sacado en 7,8 o hasta 10 años. Un maestro nos dijo alguna vez: "Aunque haya gente a la que le guste estar gritando en los pasillos que no hay recursos para la educación, lo cierto es, que los que hay no los sabemos aprovechar"; nos decía al comentarnos de un ejemplar de la biblioteca nacional que nadie había consultado en 100 años, antes que él. Siendo que era una obra importante, aunque claro que no es de las que se necesitan "para pasar el curso".

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  3. Me gustó esa última observación del Anónimo, gracias por leer.
    Es cierto que la biblioteca es perfectible, sí; es cierto que la situación de salones y estacionamiento son perfectibles, sí; es cierto que hubiera sido mejor nunca haber puesto las piedras que ponerlas y luego retirarlas, por supuesto.
    Más allá de la racionalidad o irracionalidad de los argumentos expuestos, creo que apuntas a una retórica descalificadora que ciertamente uso... Lo tendré en cuenta, gracias por comentar.

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  4. ¿Quienes son ustedes en realidad? ¿Por qué no se organizan en la facultad? hay mucha, pero mucha gente que está de acuerdo con sus feroces críticas contra los "seudo estudiantes" (y créanme que lo de seudo es en serio). Buena entrada y buen blog como de costumbre.

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  5. Hola Judas, yo soy un ex-alumno de la facultad de filos. Me gustaría tener más evidencia de que muchas personas concuerdan con estas ideas. Por eso se nos ocurrió lo del blog, para conocer los puntos de vista de los demás.

    Sin embargo últimamente hemos tenido un déficit de lectores, y desde el principio son pocos los que comentan. Al menos a mi si me gustaría que se organizara algo, pero necesitamos que los adherentes sean concientes del problema, que la ira se deje de lado y deje su lugar a la razón pues no queremos lamentar más adelante las consecuencias de un acto imprudente.

    Pero gracias por decirlo, por el momento estamos en contacto por aquí, sí hay que hacer algo.

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  6. Hace algunos meses ya, decidimos que era nuestro deber hacer algo; contrario a lo que dicen quienes entran a vituperarnos, no tenemos intereses oscuros ni perversos: Queremos que el Auditorio regrese a la Universidad y se administre como el resto de los espacios de la Universidad, al igual que los salones secuestrados. Si se trata de espacios estudiantiles, que estén en igualdad de condiciones para los estudiantes; no que sean propiedad de sus secuestradores y que estos los administren para ganarse adeptos.
    En fin... Nuestra campaña tal vez no lleve un ritmo muy acelerado, pero sí un paso consistente (tan es así que tenemos cautivos a los okupas viendo qué escribimos); como mencioné en otro momento nuestro objetivo no es cambiarlos, es cambiar la actitud de los universitarios que sí van a la universidad a estudiar, si es preciso un movimiento libertario, en nuestro caso es respecto a quienes hicieron las palabras "libertad", "revolución" y "autogestión" sinónimo de "parasitósis" o en el mejor de los casos términos vacíos de contenido.
    Gracias por leer, coméntale a tus cuates.

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